martes, 31 de mayo de 2011

El Proyecto que Cambió la Ciudad

Imagen virtual del paseo previsto por el Plan Rogers

Rogers es un arquitecto que mejora ciudades, Premio Pritzker en 2007, y en este caso le ha tocado a Valladolid ser digna o sufridora de su mejora. En 2008 el Ayuntamiento, tras un concurso en el que se proponía soterrar las vías del tren, se decantó por el proyecto del Estudio Vidal-Rogers. El plan consistía en el soterramiento de las vías del tren para evitar que con la llegada del AVE  se dividiera, aún más la ciudad. Esto supondría una verdadera revolución, ya que actualmente el Barrio de las Delicias y parte del de Argales están aislados por los pasos a nivel.

 Proyección de Talleres

En Valladolid, salta a la vista de cualquier forastero que pase por la ciudad que el tren, que dio vida en el s XIX, ahora marca las diferencias y vivir a un lado u otro de la vía condiciona, aunque el terreno sea del mismo barrio. Por eso desde el Ayuntamiento, por consenso de todos los partidos (PP, PSOE e IU), se intenta paliar esta diferencia y en 2008 se aprobó el Plan Rogers que supondría un gasto de 1100 millones de euros, compensado por la venta de terrenos liberados, 90 hectáreas. La idea del Premio Prizker en 2007, a la vez aunaría las estaciones de tren y autobuses, una obra faraónica que nada tendría que envidiar al Canal de Castilla.
Ante una obra de tan colosales proporciones y que cambiaría la ciudad de una forma radical, las primeras críticas surgieron, pero lo que pudo con la idea fue la Crisis. El Estado ha recortado presupuesto en el Ministerio de Fomento, el que debería dar la subvención, y las autonomías también. A la vez los precios del suelo, al estallar la burbuja inmobiliaria se han caído y si antes con la venta del suelo se sufragaría el 80% de la obra actualmente los plazos son más amplios.
R. Rogers que hizo, en sus palabras, su mejor proyecto aquí parece que nunca lo verá hecho, dado que está parado por su parte. Mientras los políticos que llegaron a un consenso para hacer la obra hoy debaten y se descalifican buscando el final del proyecto.
Así Oscar Puente el líder de los socialistas en la ciudad y que en las pasadas elecciones se llevó un 27% de los votos ha propuesto varias veces y defiende la reducción de costes, “lo que no se puede hacer es esperar de brazos cruzados a que amaine el problema inmobiliario”. Por eso desde sus concejalías el PSOE ya expresó al alcalde su intención de sustituirla tuneladora por el muro pantalla, lo que supondría la disminución del presupuesto en 70 millones de euros. No obstante, según los cálculos del alcalde no sería tanto el ahorro, ya que habría que desarrollar otra DIA y hacer un nuevo proyecto, lo que encarecería el proyecto de muro pantalla que además ya no liberaría terrenos. Es decir, sería más barato, pero se alejaría de lo que es el Plan Rogers, además no provocaría tanto ahorro, pero su construcción detendría todo el tráfico urbano y la construcción sería a trozos.


Según Manuel Saravia, urbanista y profesor de la Universidad de Valladolid, uno de los que se mostró desde primer momento a favor del Plan. De hecho en unas declaraciones a EL MUNDO llegó a destacar que los edificios emblemáticos se conservarían. "En Talleres se van a conservar los edificios más interesantes, como el depósito de máquinas, o el arco de ladrillo, un símbolo de la ciudad erigido para saludar la llegada del tren", dijo.
A día de hoy este profesor de la UVA es el candidato de Izquierda Unida y ha sacado tres concejales en las pasadas elecciones. Según él, el problema del Plan Rogers ha sido la tranquilidad con la que se ha tomado la obra el Ayuntamiento. “Han perdido el tiempo: primero un concurso, luego otro, luego un estudio, discutieron sobre la línea exterior, el desvío de mercancías, discusión sobre la capacidad del centro comercial… tiempo, tiempo y tiempo y ha llegado la crisis”, explica el urbanista. Eso sí ahora que los suelos con los que se iba a financiar la obra no se venden, cree que no debe ser “el todo o nada que plantea el PP”, la unificación de Valladolid desde IU se entiende como un compromiso, por lo que con los fondos actuales se debería estudiar lo que se puede hacer.


El Alcalde, León de la Riva, del PP y que mantendrá la alcaldía otros cuatro años más, y ya va para veinte, por su parte, responde a las dos fuerzas opositoras que el Plan Rogers está hecho a medida de la ciudad y cambiarlo sería un error porque implicaría unos nuevos estudios. Dicho de otra forma pagar a otros expertos para que den el visto bueno a un nuevo proyecto que también habría que pagar. El Plan Rogers es el futuro de la ciudad, aunque en su diseño se presentó mucha flexibilidad a la hora de llevarle a la práctica. Por eso la obra se está acometiendo lentamente, dado que la Junta no pone todo el dinero que se había pedido, ni tiene la capacidad para abalar la obra (un 25%) junto a  Fomento (50%) y el Ayuntamiento (25%).


Rogers es un hombre que cambia ciudades y si su plan se aprobó en consenso de todos los partidos para unificar la ciudad, lo cierto es que las obras cada vez separan más las posiciones en el Ayuntamiento.
Juan Carlos Castro


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